Estamos, entre la derecha “trifálica” y el Sánchez autoerótico, condenados al desamor y a la parafilia política. Cs podría pactar con el PSOE, por supuesto, pero no con Sánchez. Es decir, podría someterse a la política, pero no a rabietas y chocolatadas de presumido. Con Sánchez no se puede pactar, con Sánchez sólo cabe enamorarse.
https://theobjective.com/elsubjetivo/elecciones-el-cordon-sanitario-y-la-frontera-sensual/
No hay comentarios:
Publicar un comentario