27 de julio de 2012

Hoy viernes: Pactos (27/07/2012)


Tiemblo ante los pactos de los partidos, que son como los pactos míticos entre dioses, algo para repartirse el cielo mientras dejan a los humanos la tarea de sufrir su fuego, degollarse primogénitos y guardarles sus rayos en cajas. De estos pactos políticos, mayormente recordamos unas mayúsculas, porque siempre nos los escriben así, como si cada uno iniciara un Génesis, aunque luego vemos que con eso sólo pretenden subir palabras vacías en sillas altas. El Pacto por la Justicia, por ejemplo, sonaba a juramento artúrico, pero sólo iba de repartirse los jueces en los tribunales y consejos, poniendo cada partido, por turnos, un tirabuzón de su gusto. Hay pactos que se quedan en la hipocresía mutuamente excusada, como el Pacto Antitransfugismo, o que se hacen para durar lo que su titular. Otros, compran con dinero el nombre de una quimera o de una broma, como eso de la paz social. Y todos tienen algo de realidad performativa, que se materializa sólo con nombrarla. Pongan cualquier cosa detrás de la palabra ‘pacto’ y verán aparecer el espejismo: Pacto por la educación, por la sanidad, por la cultura, por el empleo… Pactos de los que no se suelen enterar ni la educación, ni la sanidad, ni la cultura ni el empleo, pero nosotros nos los imaginamos floreciendo o sanando tras su invocación y los políticos se apuntan una mera intención como logro.

Los pactos se pregonan y se traicionan, mariposean y mueren, y no significan ni valen nada por su nombre, sino por su sustancia, que casi nunca encontramos. Griñán y Zoido pueden pactar olvidar la confrontación, pero vemos a nuestro presidente usar el Parlamento andaluz como bombarda contra Rajoy hasta afirmar, nada menos, que el Gobierno ha roto el “mandato representativo” en estos pocos meses. Pues anda que si evaluáramos los cumplimientos y fracasos de ellos en Andalucía durante 30 años… Pero qué más da. Ofrecer un pacto es como lanzar una rosa por amor, hay belleza y verdad en el simple gesto, así que Griñán ha sacado ahora lo del Pacto por la Autonomía, con toda la pomposidad y la broza que ya hemos descrito para este tipo de artificios. Claro que uno adivina que por Autonomía, Estatuto, competencias, derechos, Estado del Bienestar y otros sagrados y primorosos rótulos sólo quieren decir ‘su chiringuito’. No por nada, sino porque hasta el momento no nos han demostrado que entiendan ni les importe otra cosa. La Autonomía, en su palabra, en su espíritu, en sus objetivos, puede estar tan vacía como esos pactos si se usa para lo que se ha usado aquí. Griñán menciona el “mandato representativo” sin pensarlo mucho, pero creo que todos se han olvidado de ese pacto que sí es fundamental, el de los políticos con el pueblo, ése por el que el ciudadano delega en sus representantes y éstos deberían corresponder con honestidad, diligencia y buena fe en su gobierno. Es el pacto más importante y el que menos les importa. No tiene ni mitos ni mayúsculas.

23 de julio de 2012

Somos Zapping: Al carajo con acento cubanito (23/07/2012)



Parte alícuota. Traje claro, aires habaneros y resol como castrista para que Griñán diga en las noticias que “el Gobierno quiere doblegar de forma autoritaria a las comunidades autónomas, especialmente Andalucía, y alterar con ello el modelo constitucional”. Y Mario Jiménez, comparando la situación con el 23-F… Isleñismo bananero contra imperialismo gubernamental, mientras nos vamos yendo al carajo (dígase con acento cubanito). Miren a este PSOE de aquí, con sus altivas empalizadas, sus romanticismos de la patria, sus revoluciones fundantes y su andalucismo aceitunero, que saca ahora las banderas del 28-F como si ellos no se hubieran estado sonado los mocos en ellas durante 30 años… ¿Cómo se atreven, cuando todavía estamos pidiendo dignidad, trabajo, cultura y salir del tercermundismo, igual que en aquellos días ingenuos? Ellos, que se han dedicado a mantenernos pobres, incultos y menesterosos para que dependamos de la Junta hasta para limpiarnos el culo, mientras su numerosa y hambrienta casta partidista-institucional lo controlaba y lo rebañaba todo… Ése ha sido el fracaso, no el modelo autonómico en sí, sino el modelo partitocrático. El de las grandes empresas-partido, PSOE y PP sobre todo, repartiéndose los poderes del Estado, las autonomías, los tribunales, las cajas de ahorros, para sus intereses y sus enchufados. Qué cinismo: la Junta se erige en defensora de los pobrecitos y los débiles que ella misma ha ido creando precisamente para eso, y el Gobierno culpa a la “herencia recibida” olvidando la parte alícuota del PP en la corrupción, el derroche y el saqueo de lo público. Además, ni hundiéndose el país son capaces de plantearse una reforma que acabe con los privilegios, con los abusos, con los chiringuitos partidistas que han sido los que nos han arruinado. ¿Isleñismo bananero contra imperialismo gubernamental? Cada vez son más parecidos los trajecitos, los acentos y los bronceados.


Capitán Andalucía. Roberto Sánchez Benítez salió de la cápsula, aún envuelto en humo verde, verde Andalucía, verde que te quiero verde, y contempló en el espejo del laboratorio su apabullante musculatura, su recia mandíbula, la perfecta simetría de sus facciones, los ojos que brillaban con una inteligencia definitivamente sobrehumana. No hacía falta comprobarlo, pero levantó con un solo brazo una partida de jamones, voló luego hasta el aerogenerador más cercano, memorizó en un segundo un libro de chistes y sedujo levantando la ceja a todo el elenco de Se llama copla… Ya lo sabía. No había sido únicamente la exposición a Este Sol y Esta Alegría, las misteriosas radiaciones mutágenas que sólo se encuentran en Andalucía. Ni aquella mordedura de un camaleón protegido. No. La respuesta también estaba en la Historia, en su genética andaluza privilegiada, mezcla de las mejores razas, en su tolerancia y su cultura de la paz biológicamente impresas, más el impulso innovador que hacía a su ADN especialmente receptivo a los agentes mutágenos sostenibles. Todo eso, claro, despertado y aumentado por la superior tecnología de la Segunda Modernización, división científica de la todopoderosa agencia secreta La Junta. Sí, sabía perfectamente qué le había ocurrido, quién era él, cuál era su misión, y se contempló de nuevo con serena satisfacción. Ahora era el Capitán Andalucía. Y su cuerpo refulgió en verde antes de desaparecer hacia el atardecer siguiendo a un helicóptero de Juan Lebrón…

Superpoderes. El cuentito de antes me lo ha inspirado una increíble entrevista en Salud al día a una actriz de Los protegidos. Fue así: “¿Cuál es el secreto de tu belleza?”, le pregunta Sánchez Benítez, aunque para contestarse él mismo: “Te lo voy a decir: tienes familia andaluza”. “En mi familia no hay tendencia a engordar”, dice ella luego. “Porque es de origen andaluz”, concluye él. Con superpoderes queda igual de ridículo, pero más divertido.

  
Corcho sostenible. El titular: “La Almoraima, ejemplo de corcho sostenible”. La imagen: un señor cargando corcho en un borrico. A ver: de lo que se trata es de ser sostenibles en el siglo XXI. En el siglo XII, no tiene mérito.

20 de julio de 2012

Hoy viernes: Días de febrero (20/07/2012)

Quizá tenga razón Mario Jiménez. Hemos fundado jardines enrejados, gente terriza, torres anilladas con lunas, la plata de escarcha del pobre, la esperanza siempre aplazada de las buenas personas… La autonomía… Tuvimos demasiado pronto palabras y días para todo eso, mucho antes de tener nada de verdad, sólo la promesa, las ganas, el hambre, las puertas abiertas y el pecho apenas picoteado por la libertad. Hemos fundado el barco del sol, las banderas de las manos, la espalda molida, los ríos de la seda que pasaba por la Historia, el amor de la arena con nuestros ojos… Quizá haya que volver a recordar aquellos mitos fundacionales, esos días de febrero con calles hechas colinas hacia arriba, defendiendo un Estatuto como a una novia, defendiendo una Constitución como a un padre, por el tirón de la sangre y del honor y de la responsabilidad y de la conciencia. Quizá tenga razón Mario Jiménez. Quizá haga falta otro 28-F con la Historia despertándose a deshora, a contrapié de los poderosos, con las luces de los ojos en las manos y las ganas de los brazos en las gargantas.

Que venga otro 28-F, sí, pronto, porque aún hace falta pedir lo mismo que entonces: la dignidad de ser tratados como un pueblo adulto, libre y fuerte, no como pobrecitos niños ignorantes, necesitados, dependientes y desamparados; la exigencia de escapar de la miseria, del tercermundismo económico y sociológico, de derrotar el paro que nos esclaviza, de terminar con la incultura como estrategia de sometimiento; de traspasar el chistosismo y el folclore, corral en el que nos encierran los verdaderos señoritos para que no vayamos más allá… Y también para pedir libertad, eso que se les olvidó a muchos salvo para pintarlo. Que aprendieran tantos administradores de esa palabra que la Democracia no es su ideología, sino que su ideología debe estar dentro de la Democracia. Que escarmentaran tantos trincones de lo público al darse cuenta de que las urnas no dan derecho a que lo de todos sea suyo. Que oyeran, ésos que se han apoderado de las grandes palabras pero las malbaratan y emputecen, el grito de hartazgo y asco que nos producen tantos dueños, padrecitos, demagogos, aprovechados, buhoneros, vividores y tontopollas. Recordando aquellos días de febrero, cuando éramos inocentes, puros como las mañanas con frío, deberíamos pedir todo eso que aún se nos niega y defenderlo con valor y civismo en la sociedad y en las urnas. Quizá tiene razón Mario Jiménez, a pesar de que ese 28-F que pide sea todo lo contrario a lo que ellos representan. El 28-F es todo lo que ellos no hicieron. Hemos fundado verdades de paja, caciques del alma, beneficiarios de los sueños, traidores satisfechos, ladrones que arengan e ingenuos que cantan. Lo hicimos nosotros o lo hicieron ellos en nuestro nombre, da igual. Y aún nos llaman para que nos levantemos tras sus banderas podridas.

Somos Zapping: La defensa de los terremotos (16/07/2012)



Sola. A Fátima Báñez no la acompañó ni la Virgen del Rocío a la hora de defender los recortes del Gobierno. Y no me refiero a que ese día no vinieran al congreso del PP andaluz ni Soraya Sáenz de Santamaría, que en cada rueda de prensa tiene peores pelos, ni Montoro, que en cada declaración tiene menos voz. Me refiero a los informativos de Canal Sur, el sábado, donde sólo estuvo ella contra una avalancha de sindicalistas, izquierdistas de la entente, funcionarios, transeúntes y peluqueros, todos cabreadísimos. Este Gobierno de Rajoy creo que se parece más a la cuadrilla de un torero cogido que a otra cosa, pero Canal Sur lo trata como una plaga, le da el tratamiento informativo de las catástrofes, recreándose a cámara lenta en las víctimas y los destrozos, reviviendo y adelantando los sufrimientos. Y como las catástrofes no tienen defensa, pues pasó lo del sábado. Abrieron con “las protestas en la calle por los mayores recortes de la democracia”, y luego dispusieron la cosa así: en un lado, las “primeras reacciones” de Méndez y Toxo, presentando sus manifestaciones o sus cerillas; luego, Valderas, Pastrana y Carbonero; seguidamente, Rubalcaba y Cayo Lara; continuaron con la “indignación y la crítica” de la calle, con peluqueros y gerentes de cine; y, para terminar, Mario Jiménez y Francisco Cornejo. Todos cantando al hachazo, al apocalipsis y a la resistencia. ¿Y en el otro lado? Fátima Báñez y flases de segundos de los muy laterales Rafael Hernando y Elías Bendodo. Por supuesto, esta información, como corresponde a una cadena pública, fue objetiva, veraz, plural y equilibrada. Es evidente. ¿Desde cuándo hay que reservar espacio en las noticias para que los terremotos se defiendan?


Entrenamiento. Zoido ya manda en el PP andaluz, aunque la impresión que me ha dado a mí es que en este congreso lo han elegido Rey Melchor de la cabalgata del Ateneo. No me convence nada Zoido, al que veo a su escala municipal de farolas, verbenas y belenes, pero sin discurso ideológico global ni conocimiento del terreno para enfrentarse al imperio del PSOE andaluz. Además, queda por ahí con él un hilajo de un PP antiguo y en salmuera que ha preferido rebuscar en el desván en vez de apostar por rostros e ideas nuevas. No ha dado mala cobertura Canal Sur de este congreso, quizá con una tenue y satisfecha atmósfera de duelo por Arenas, como si retransmitieran la pira funeraria de Héctor. Claro que, en el del PSOE, Carmen Benavides recibió a Griñán en un set con todas las pegatinas socialistas puestas, una entrevista que consistió en dar el pie para que el Presidente soltara su perorata. A Zoido, en cambio, me lo perdí siendo entrevistado por Canal Sur en plan actor de promoción. También se coló alguna valoración personal, chirriando, en las crónicas: para Carmen Benavides, “recuperar la calle” es “una tarea que se antoja quizá difícil después de las medidas emprendidas por Mariano Rajoy, sobre todo si sigue creciendo la contestación social”. Bueno, que se vaya acostumbrando Zoido a la “contestación social” y a la de Canal Sur, que a lo mejor son la misma. Forma parte de su entrenamiento, por ahora más de Karate kid que de Rocky.


Breaking bad. No podía ser. Entre refritos, videoteces, copla, consuelos de pobrecito, niños petardos y propaganda sociopolítica, ahí en Canal Sur, de repente, Breaking bad, una de las mejores series de la historia, que parece hecha a la vez por Coppola, Hitchcock y Tarantino… Pero no, Canal Sur tenía que estropearla. Y de una manera distintivamente cutre, por supuesto: no ajustaron el aspect ratio, el formato, un simple y cotidiano 16:9, y la tuvimos que ver innecesariamente aplastada y con bandas negras. Y les ocurre más veces, en películas o en series como Damages. Tampoco es tan complicado, señores. ¿O es que compran en el top manta? Es curioso cómo Canal Sur puede ser tan chapucero a veces, teniendo tantos recursos. Creo que la explicación es el poco respeto que le tiene al espectador. Qué les importará el aspect ratio a los que son carne de copla y de película de combois estrujada…

13 de julio de 2012

Hoy viernes: Sector crítico (13/07/2012)


Te puede no gustar Griñán como te puede no gustar Juan Pardo. Otra cosa es todo un sector crítico, o sea, algo ya con cuerpo, entidad y objetivos; una guerrilla juramentada o un club de ex esposas políticas. Yo me pregunto: ¿con qué es crítico este sector crítico? Lo digo por si se le está dado peso, identidad y nombre como de comando a lo que puede ser sólo una acumulación de descontentos variopintos. Muchas cosas han pasado en el PSOE, dentro y fuera de Andalucía. Chaves abdicó, el zapaterismo se derrumbó y estos dos lutos nos dejaron en Griñán y Rubalcaba una sensación de provisionalidad convaleciente, de interinidad con la pata arrastrando. El PSOE, débil como nunca, estuvo a punto de perderlo todo. Pero conservó Andalucía y los muertos resucitaron. Y las facciones. Ahora sí importaba quién había apoyado a Rubalcaba o a Chacón, quién olvidaba a Zarrías, quién rezaba a Chaves o quién enterraba a Pizarro; quién subía con Griñán y quién se quedaba sin sitio y sin teta por su culpa, quién cumplía la omertà en los ERE o a quién le asqueaban de verdad. Incluso quién esperaba una purificación poschavista del PSOE andaluz. No sé yo si es tan fácil formar en medio de todo esto un equipo de fútbol uniformado contra Griñán, que es lo que parece que se quiere hacer con ese sector crítico. Ni siquiera sé muy bien qué representa Griñán.


Griñán siempre ha sido más funcionario que político. Tuvo ministerios y consejerías, pero de ésos que se les dan a los gafitas, a los opositores, a los técnicos. A los políticos de verdad, lo que se les da es un ministerio del que no tengan ni idea, y por ahí se les reconoce. Griñán era un poco ese funcionario callado, tristón y madrugador con los dedos manchados de tóner, como un churrero de las instituciones, hasta que Chaves le dejó en herencia Andalucía. Entonces Griñán tuvo que andar el camino inverso, del técnico al político. El recién llegado se encontró una Junta como un imperio chino y un partido con sus familias, hipotecas, prorratas, intrigas y bocados. Un partido que Chaves había sabido manejar a base de cuotas, mano izquierda y vista gorda, pero del que Griñán no sabía nada. Aún se está enterando, me parece a mí. La verdad, creo que lo que ocurre es que todavía no sabemos cuál es el proyecto de Griñán (ni el de Rubalcaba). Griñán no ha cambiado ni el discurso ni los modos del sociatismo andaluz, sólo ha sustituido la maña de algunos viejos soldados por la desfachatez de nuevos cachorros con hambre. Y ahí estamos, a la espera de ver si Griñán es capaz de algo más aparte de poner a sus ninis a hablar en modo para tontos. No es difícil ser crítico con Griñán en este PSOE. Lo interesante sería saber el porqué de cada uno. Y ya veríamos si eso tiene un solo cuerpo o muchas patitas.

10 de julio de 2012

Somos Zapping: Conjugando el verbo derecha (9/07/2012)



Relevo. Fundida su camisa blanca con el fondo también blanco del escenario, Griñán parecía en Canal Sur el gato de Cheshire sobre un atril. De invisible a aparición, de desahuciado a resucitado, de segundón a líder… Por todo esto ha ido pasando Griñán, dando siempre como sustos de fantasma. Era éste el congreso de la redención y de la renovación, aunque no en el ámbito ideológico, sino en el orgánico. Ha sido un cambio de guardia interno: la vieja guardia chavista deja paso a la nueva guardia nini, pero queda intacto ese concepto tan suyo de la política inercial, escaparatista y de banderola ideológica, mientras el partido se dedica realmente a lo suyo, a repartirse Andalucía. Estos saraos, en fin, tienen más cartón que sustancia, pero al menos éste nos ha dejado bastantes joyitas, tantas que Canal Sur tuvo que mandar a tres reporteras. La de Griñán diciendo que él “no tiene críticos” y haciendo con ese conjuro que se le aparecieran en el 30% de los votos, es desde luego la mejor. Es una especie de magia inversa, la  magia del gafe. Claro que esta corriente crítica hay que medirla bien. No son todos socialdemócratas renovadores, hartos de un PSOE pasota, propagandista y rebañador de lo público. Son más bien los que se han quedado sin sitio, los que tienen que dejar la cuchara y retirarse (sobre todo en Cádiz y Jaén), o los que le echan en cara a Griñán lo de los ERE, pero no por permitirlos, sino por no defender a los compañeros implicados, esas criaturitas… Otra perla fue la de Elena Valenciano, que impresiona aún más por la contundencia y la seguridad con que la vimos pronunciarla: “Aquí se conjuga el verbo austeridad de otra manera”. El verbo austeridad… Ya vemos lo que ha sido este congreso: un relevo de poder por fin consumado (los griñaninis por los viejos chavistas) pero que aún escuece, y bajo la conocida fachada de la confrontación, los tópicos y las tontadas. Dijeron “la derecha” más veces que “andaluces y andaluzas”... Es que tenían que conjugar todo el verbo “derecha”.


Regusto a lata. Rectifico lo que dije la semana pasada: Eva Gónzalez y Manu Sánchez son todavía peores que Carmen Janeiro presentando refritos. Lo de Carmen Janeiro con Eduardo Banderas era malo pero surreal, diría que enfermizamente impactante. Al menos, sus guiones desquiciados necesitaban de más atrezo y más porros. Eva y Manu tienen más regusto a lata que los vídeos que ponen. Eva González está igual que en los anuncios de El Corte Inglés, o sea, puesta allí con dos pincitas a sonreír. Y a Manu los guiones le secan la gracia como la yerbabuena… Más que humor, quieren darle algo de tensión romántica a la cosa, pero aquello no es Luz de luna precisamente. Si acaso, Morena clara al revés. La verdad, para presentar a Tip y Coll o a Gila, sobran.


Densa cutrez. La copla es como Walker: no sé si es que nunca se acaba o es que se repite siempre. Cuatro horas de copla el sábado, otro refrito de galas, retrospectivas u homenajes para encontrar “la mejor copla” de la historia, cuando todo el mundo sabe que es Romance de Curro el Palmo, de Serrat… En el poco tiempo que lo soporté, descubrí el vibrato más feo que he oído en mi vida, que los de Canal Sur son capaces de rotular “Me embrujastes” (sic) sin que se les salten los ojos y que el croma parece que lo hacen con un Spectrum. Densa cutrez y sobras regurgitadas. Ya es verano en La Nuestra.


Paquete turístico. En los anuncios de turismo de la Junta nos invitan a dejarnos llevar por las sensaciones, a mojarnos la melena en morerías, a dejar un pie descalzo sobre una nube y otras acuarelas o hipnotismos de ese estilo. Lo que nunca me imaginé es que iban a usar como reclamo para que nos visiten los forasteros nada menos que las “buenas noticias”. “Necesitas buenas noticias”, dice el nuevo anuncio… Hombre, aquí de eso tenemos poco… A menos que se meta Canal Sur en el paquete turístico, claro. Así sí quedaría completa la Andalucía que la Junta anuncia: su paraíso de flojera, postales y realidad filtrada, adornada o inventada.

7 de julio de 2012

Hoy viernes: Fieras de partido (5/07/2012)


Susana Díaz tiene pinta de profesora de autoescuela, pero dicen que es un 'animal político'. No sé yo. También lo dicen de Zoido, que a mí me sigue pareciendo políticamente una folclórica. Yo distinguiría el animal político de la fiera de partido. Un animal político era Felipe González. Inteligente y seductor, sabía bailar con el partido y besar y mentir al electorado, como un tanguista del Guadalquivir. Tenía percha y labia y era capaz de conllevar un elevado sentido de Estado con una demagogia simple pero artística. Te podía engañar, pero siempre como un mago, no como un buhonero. La fiera de partido es diferente. Mientras el animal político ve como desde arriba su partido, la política, el país y la sociedad, la fiera de partido reduce su ámbito a los pasillos. Por allí da mordiscos o regala chocolatinas, pero sigue pareciendo un visitador médico con ambiciones desmesuradas o asesinas. Ahí pongo a Susana Díaz, que puede ser mortal en un congreso, pero fuera hace política de baratijas, a base de discursos memos, eslóganes de detergente y aviesas pedradas a la inteligencia como a unos pobres gorriones.

Susana Díaz, generación griñanini, crecida como una lechuga dentro del criadero socialista y entrenada ahí como en un dojo; Susana Díaz, que no ha conocido otra cosa, que no sabe otra cosa, fue subiendo en el partido como se sube en esos sitios hasta que la llevaron en góndola a la Junta. Ahora ha vuelto al partido como un viajero oriental, a seducir con sedas, mejunjes, dragones y pecado. En vísperas del congreso provincial de Sevilla, sus propios compañeros la acusan de usar las instituciones para medrar en el PSOE. Ha dicho Borbolla que no se puede competir contra su candidatura porque viene con el sello real del BOJA, esa firma que “sirve para contratar a militantes del PSOE-A”. ¿Escandaloso? No, lo normal en la avilantez de esta política corrupta que mancomuna instituciones y partido, lo público y lo privado, lo de todos y lo suyo... Eso es lo que tenemos, no tanto animales políticos como mediocres con hambre, basureros de la lógica, regateadores de zoco, mortíferos gañanes, loteros de la demagogia y piratas esquineros; esas fieras de partido, avaramente cuchicheantes y urdidoras, como viejas envenenadoras... Y eso, donde hay un partido... En el PP andaluz, que no era un partido, sino una cofradía de pasión alrededor de Arenas, no hay ni aspirantes ni familias ni creo que gente. Sólo Zoido, político al que le veo la corbata como una peineta, y luego un montón de huérfanos. Ya no hay verdaderos animales políticos, esos que al final salían mejor o peor, pero iban acompañados de su estatua y llevaban la posteridad como un perfume canalla. Sólo hay pequeñas fieras de corral y, de vez en cuando, algún triste funcionario, melancólico como Pessoa, que se deja llevar por la sombras de los árboles hacia la tarde, la miseria o la corrupción.

Somos Zapping: La mujer de Colombo (2/07/2012)



Las subvenciones existen. Emilio de Llera es ese nuevo consejero de Justicia de la Junta que se parece a Colombo. “La que sí me riñe es mi mujer”, dijo en la entrevista de Canal Sur cuando le preguntaron por sus meteduras de pata, que él llama “frescura”. Colombo era único despistando con el despiste y usaba los lamparones y los comentarios sobre su mujer o su perro para parecer inofensivo. Llera tiene algo de esa despeinada listeza y también una gabardina por encima para que le resbale todo, por ejemplo el “rollo” de los ERE. Tengo que agradecerle a Mabel Mata la novedad y la gran audacia periodística de entrevistar a un consejero de la Junta (le recomiendo que lo haga de vez en cuando), porque Llera nos retrató su alma en un rato. Observen esta increíble y, desde luego, fresca argumentación para defender la legalidad del procedimiento que usó la Junta para esos ERE: “Las regulaciones de empelo (ERE) están previstas en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores, luego el procedimiento es legal (!); las políticas de fomento que se hacen a través de subvenciones, también son legales... (!!)”. Es decir: los ERE existen, las subvenciones existen, luego ellos pueden coger el dinero público que quieran y dárselo a quienes les dé la gana sin ningún control ni fiscalización, y “el procedimiento es legal”. Y luego añadió (me lo imagino rascándose la cabeza, aunque no lo hiciera): “Otro tema es que haya quien se ha lucrado, saltándose un poco las reglas del juego”. Saltándose un poco... Tierno fingido, estrangulador de la lógica, nuestro encantador detective se disolvió poco a poco para dejar sólo al político. Porque Llera va de novato, de diletante, pero ha demostrado ya las buenas malas mañas de la política de aquí. Fue alucinante verlo pontificar sobre “conductas antijurídicas, antiéticas y antiestéticas”. ¿Se refería a esos ERE empapados en farlopa, a algún consejero ya entrullado, a lo de Mercasevilla, quizá a la familia Chaves? No, es que le preguntaron por Dívar (tema muy andaluz). Lo de Dívar le parecía “al menos antiestético” y dijo que él “hubiera dimitido mucho antes”. Encantador cómo nuestros políticos se ofrecen a dimitir... si fueran otros. También dejó claro que lo que quiere la Junta es descubrir la “verdad” de los ERE (como si no la supiera) y que trabajará como consejero “desde la objetividad, la imparcialidad y la legalidad”. ¿La política, algo “objetivo” e “imparcial”? Se ve que Llera tiene disimulo, descaro y cinismo. Nuestro particular Colombo ladino tiene serie para rato.


Majestades. Como Fátima Báñez se ha hecho un poco princesa de las marismas y Zoido tiene algo de rey de bastos en la nueva baraja política andaluza, el PP ha querido compensar nombrando a Susana Díaz “reina de los informativos de Canal Sur”. Vale, sale mucho, pero su majestad más bien se queda a la altura de dama de honor de boda. O eso pensé hasta que la vi en las noticias, entrando a un acto acompañada por el logo y la sintonía de los informativos, mientras la recibían escolares aplaudiendo. Eso sí que es definitivamente regio. Borbónico, diría yo. Seguro que le organizan concursos de dibujos: “Qué es una Consejera de Presidencia para ti”. Políticos, niños aplaudiendo y cámaras siguiendo las alfombras y el amor lacayo del pueblo... Sí que tenemos aquí esa monarquía audiovisual. Con varios reyes y reinas. Más Mario Jiménez haciendo de paje.


Más que salvados. El nuevo programa de Eva González y Manu Sánchez se llama Satán y Eva y será lo nunca visto: videoteces enlatadas de Canal Sur presentadas con gracietas. El refrito veraniego de siempre, aunque lo venden como una especie de terapia o conjuro anticrisis: “Siempre fuimos capaces de con humor, salir de todas”, pone en su web con sintaxis rara. Sí, van a salvarnos con chistes. Otra vez. Pues deberíamos estar ya más que salvados. De momento, en la promo intentan repartirse los roles de payaso augusto y bobo: “¿Pares o nones?”, pregunta Manu; “Ay, no, que a mí se me da muy mal” (!), contesta Eva. Yo creo que harán de Carmen Janeiro los dos.

Hoy viernes: El tabaco de la izquierda (29/06/2012)


Ahora que estoy quitándome de fumar, se me ocurre que la izquierda era o es como un tabaquismo obrero, político o histórico. Como esos cigarros fuertes que se fumaban en los tajos, un tabaco intenso, antiguo, purgante, empecinado, con el que establecías un compromiso estético y una relación de fidelidad, sufrimiento, placer, lucha, dependencia, condena y camaradería hasta la misma muerte. Con la izquierda o lo que queda de ella, lo que han dejado las revoluciones marxistas, las dictaduras seniles o las utopías con morral, se puede estar o no de acuerdo, pero lo que no se puede negar es que aún conserva ese olor viejo y fuerte, esa intensidad un poco salvaje, esa ajada pureza. La socialdemocracia, el liberalismo, la derecha o derechona, atienden al mundo de ahora, un mundo físico y cercano en el que los países son oficinas y el dinero pesa más o menos, pero se puede pesar. Sólo la izquierda no está en el ahora, sino en la eternidad, sólo la izquierda se permite ignorar el dinero, sus máquinas y el mundo construido con ellos, proclamándose alegremente loca; sólo la izquierda habla aún con poemas y cree que sus ortodoxias pueden y deben imponer la felicidad. No es que todo esto sea bueno, ni útil, ni siquiera posible... Pero sí es algo propio. La izquierda, con su mitología, su estética, sus fetiches, sus infantilismos, sus dogmas, sus ensoñaciones, quizá sólo está aquí para proclamar que no pertenece a este mundo.

¿En qué se nota que Izquierda Unida forma parte del Gobierno de Andalucía? Pues en nada. No, la izquierda, tan propia y bizarra, no puede pertenecer a este mundo. Al incorporarse al sistema contra el que lucha, pierde su identidad. Ya es otra cosa, la política vulgar del carguito, el enchufe, el poder orgánico, el cucharón en la olla. O sea, la izquierda juntita de Valderas, que es como la de Torrijos. Esa posible Andalucía social-comunista, que tanto se comentó, no se ha dado. El poderoso PSOE sigue gobernando a placer después de seducir con baratijas a una izquierda muerta de hambre. Una izquierda que ya apenas lo es desde que la envolvieron en moqueta y depilaron a Valderas, vicepresidente de nada, apenas de los ascensores. IU creía que iban a ser la llave de todo, pero no tienen ninguna fuerza. Si se rompe su pacto, IU pierde sillones, colocados y dinero, pero el PSOE, simplemente, se encontraría con unas elecciones anticipadas en condiciones muy favorables, con el PP en retroceso e IU quemada por su colaboracionismo. El PSOE ha domesticado a IU y lo está engordando para matarlo. Yo, la verdad, agradezco que no puedan levantar koljoses, pero entiendo la división interna y el cabreo de notables y militantes en IU. Ese tabaco viejo y fuerte, así era la izquierda. Te gusta o no, pero lo distingues al momento. En los despachitos, Valderas fuma ahora cigarrillos falsos de chocolate. 

Somos Zapping: Monaguillos que cobran en galletas (25/06/2012)



El Vaticano andaluz. Lo institucional no existe aquí. Sólo es el papado que se erige lo partidista. Es una de nuestras grandes carencias democráticas: la ignorancia y el desprecio de los gobernantes hacia lo público entendido como verdadero espacio común. Ellos no pueden verlo sino como otro despacho más de su sigla. Se cumplían 30 años del Parlamento Andaluz, Manuel Gracia hablaba en Canal Sur de la “arquitectura institucional de Andalucía” y lo veíamos junto a Griñán y a otros bustos del acontecimiento defendiendo sus encomiendas sagradas, muy inflamados por esos discursos pomposos e hipócritas que les salen a los políticos cuando quieren trasladar la Democracia desde sus intereses a una pinacoteca o un altarcito. Todo ese plateresco para luego ver que en el libro conmemorativo, igual de plateresco, se calificaba a Chaves como “de los pocos políticos conocidos que podría haber llegado a beato si hubiera un Vaticano de la política” y se metían con este periódico. Yo le diría a Antonio Avendaño, periodista que escribió ese panegírico con todo su corazón, pues trabajó para Chaves, que en Andalucía el Vaticano de la política existe. Es ese PSOE-Junta, esa Autonomía-Partido, inseparables, indistinguibles. Ese Vaticano en el que hay papas y papadas, santos y sagradas familias, cardenalones y banqueros de Dios, profetas y evangelistas, Inquisición y Guardia Suiza, así hasta llegar a sacristanejos, chupavelas y monaguillos que cobran en galletas. Por ahí tiene su hornacina Chaves y también su hueco Avendaño. Hasta este periódico tiene su sitio: el Infierno, por supuesto. Otro lugar en su mitología y en sus círculos y coros celestiales sería un insulto.


Hasta el gorro. José Chamizo, entre el cielo y la tierra, no termina de estar en la política como no termina de estar en el sacerdocio. Sin embargo, su cargo parece un purgatorio institucional, un confesionario de lágrimas o una misión en un altiplano. Condenado a recibir quejas e inventariar carencias sin poder hacer nada, es normal que le sobrevengan crisis de fe y unos reverendos cabreos como los que le darían al gran Juan Luis Galiardo haciendo de cura. A lo mejor Chamizo debería dejarle el puesto a Toñi Moreno. De todas formas, me pareció simpático verlo en las noticias de Canal Sur hablándoles a los políticos como un padre o como un cura arremangado: “La gente está hasta el gorro de todos ustedes”. Suave me parecen sus comentarios para lo que el pueblo que supuestamente defiende les diría de verdad a los políticos. Pero éstos se han molestado y le han recordado que él también debe contribuir a la “dignidad de la política”. Chamizo, en realidad, nunca ha sido ni demasiado útil ni demasiado molesto. Lo suyo es una beatífica tibieza bien pensante y una especie de perroflautismo con despacho, decorativos y neutros. Por eso se ha ido haciendo eterno y traslúcido en la política andaluza, de una manera algo mendicante. Chamizo tiene más razón que el santo que le presta la cara, pero este arrebato, que le hizo estrella mediática, ya ha provocado que los que mandan empiecen a pensar en el día de su crucifixión. Un Defensor del Pueblo que defiende al pueblo es lo último que se puede consentir.


Copla y melonar. Me critica una amiga que no comente la, por lo visto, escandalosa final de Se llama copla, con novios pasando por la cara y cantando de la mano o algo así que no termino de entender. La verdad es que ya no veo Se llama copla como no veo películas de Esteso. De todas formas, me interesa más lo que puedan hacer juntos Eva González y Manu Sánchez en su nuevo programa. No sé si cantarán copla en un melonar o se pintarán las uñas haciendo chistes que tengan cien kilómetros de alcance. Pero me alegro porque vi a Manu Sánchez muy preocupado por quedarse en el paro con el final de temporada. Cómo va a quedarse parado aquí alguien que imita tan bien a Rajoy, hombre... Por cierto, Manu, monstruo: me han dicho que me he perdido tus pizarras sobre los ERE, que lo explicaste todavía mejor que la mitología griega. Pásame el youtube o algo, anda, que no las encuentro.

Hoy viernes: Siglo de Oro (22/06/2012)



Rajoy, que yo siempre digo que es como un paraguas que se dejó Aznar, es un señor de provincias que está haciendo una política de provincias y de mercería cuando el mundo está más ancho y loco que nunca. Él hace cuentas con sus botones, desayuna una galleta cuando la gente se desayuna Wall Street, nos tranquiliza con comadres, ruega a una Virgen con enaguas y no entiende nada de lo que está pasando. El otro día, en la cumbre del G-20, donde España parecía igual que él, sostenida sólo por su corbata, lo vi completamente sobrepasado. No parecía saber dónde estaba ni adónde iba y sin embargo contestaba a las preguntas de los periodistas como un humorista. Se nos va a convertir en José Mota. Zapatero era un iluso, y un niño al que le daba miedo decir cómo estaba la cosa por si dejaban de quererlo. Rajoy era un señor serio que ahora hace gracias cuando no sabe qué decir y parece que miente pero es porque nunca sabe cuál es la verdad a la hora en que habla, que es peor. Rajoy pertenece a una ortodoxia muy española de hacer las cosas como Dios manda, pero para eso se necesita un altarcito, un misal, la referencia de una iglesia de su pueblo u otros asideros que no se encuentran en esta Babilonia actual. Y como Rajoy no los encuentra, saca la sonrisa de cremallera, el corte al periodista y esa política suya de la aparición menesterosa. Zapatero creyó que no pasaba nada. Rajoy creyó que bastaría con ordenar un par de cajones y bendecir la mesa. Los dos han terminado con la sonrisa idiota del tartazo en la cara.

Algo de la falta de credibilidad de España debe de ser por eso, por tener un presidente metido en un paragüero, seco y discretamente funerario, que de repente, superado por la situación, se vuelve escapista y chistoso. Otra parte de la culpa la tienen unos mercados que han olido sangre, pero porque la hay. El resto creo que viene, simplemente, de que España es España, país de pillos, tardones, sectarios, comodones, trincones y sentimentales mitológicos. Credibilidad y seriedad, esperan de nosotros. Sí, nosotros, con cajas que se arruinaron sirviendo a los partidos, con gloriosos imperios autonómicos, con guerras paleolíticas y simbólicas, con políticos cocidos en chanchullos y calabozos. Que miren los hombres de negro a Andalucía, los palacios y burocracias de la Junta, las cintas de Mercasevilla, Laura Gómiz, el chófer de la coca, la madeja de los ERE; que oigan a los políticos del lugar, que vean Canal Sur sobre todo en Semana Santa, ferias o el Rocío. Credibilidad, seriedad... Primero Zapatero, un ingenuo, y ahora Rajoy, un hombre de su casa que sólo sabe rebarrer lo mismo hacendosa e inútilmente y ya usa el humor desdeñoso de las criadas de las óperas. Fuera no se fían de nosotros porque nos conocen (Rajoy no ha cambiado eso). Y nos conocen por lo que hemos hecho, no porque se hayan leído mucho todo lo del Siglo de Oro.

Somos Zapping: El reparto de Falcon Crest (18/06/2012)




Despedida. Fue un día histórico: Javier Arenas abrió los informativos de Canal Sur. Al principio, creí que se había muerto, que es lo piensa uno cuando al comenzar el telediario sale un viejo actor o ciclista. Pero no, Arenas dejaba la presidencia del PP andaluz. Para las noticias de Canal Sur, es sólo como si se quedaran sin el hombre del tiempo (Arenas salía bastante menos, colocando algún nubarrón en el cielo soleado de la Andalucía socialista y poco más). Para el PP, es como si se quedaran sin Papa. Incluso antes del último congreso, en el que lo subían al atril con música de Braveheart, Arenas se había convertido en una especie de Mesías salvador por aclamación y por necesidad. Siempre lo he considerado un político inteligente, preparado y trabajador, aunque con esa tarea pesada de tener que tirar al mar muchos viejos baúles de la derecha en Andalucía. Arenas modernizó el PP andaluz, lo llevó a ganar las municipales y las autonómicas, pero entre el golpe de la última victoria-derrota y una parte del partido que reaccionó como los hinchas que piden la cabeza del entrenador por perder con el Logroñés, este fin estaba cantado. Canal Sur lo despidió regalándole un comienzo de informativo y luego (como todo el periodismo) terminó de amortajarlo jugando a las quinielas de sucesores. Lo malo de un partido construido alrededor de un Mesías es que no hay nadie más tras él. Por eso, las listas para suceder a Arenas sonaban a rescatar el reparto de Falcon Crest. Al final será Zoido, que ha ganado su propia Operación Talento, el que ocupe su puesto. A Zoido lo veo bien para una cabalgata o una procesión, pero no me lo imagino de candidato contra Griñán. Mientras se busca otro líder para la renovación, hablarán por el PP alcaldes, carguillos y viejas glorias. Me da que, durante un tiempo, en Canal Sur va a parecer que Griñán, Susana Díaz y Mario Jiménez se enfrentan sólo a teleñecos.


Leyenda urbana. Griñán, de profesión sus entrevistas, se fue esta vez a Canal Sur Radio y a TVE. En la de aquí no faltó el habitual recibimiento de Pablo Carrasco, que hace el papel de esas chiquillas con ramos de flores de los Juegos Olímpicos. Siempre me resulta un poco obsceno ese posado de Griñán con Pablo Carrasco en cada visita a la RTVA. Sí, la cortesía es la cortesía, pero cuando detrás hay una relación de sumisión, la escena tiene algo de amantes disimulando en público. El caso es que Tom Martín Benítez entrevistó a Griñán para que se explayara sobre banqueros, deudas y atracos (ajenos). Pero creo que me despisté y me perdí una parte. Sí, justo la parte en que Tom Martín Benítez le pregunta por los ERE y el fondo de reptiles. ¿Se la perdieron ustedes también? Vaya. No me digan que nunca pasó y sólo es leyenda urbana, como lo de Ricky Martin y el perrito... Por favor, si alguien oyó esa pregunta, que me lo haga saber: no quiero dar la impresión de que dudo de la objetividad, neutralidad y pluralidad de la RTVA y sus profesionales. En la otra entrevista, en Los desayunos de Televisión Española, Griñán manifestó que le gustaría comparecer en la comisión sobre los ERE. A él eso no le parece “un circo”, como a Mario Jiménez. Pero no se preocupen, que todo se quedará en las ganas. Griñán no comparecerá. Más que una declaración valiente, fue la de un ventajista. ¿Le gustaría igual a Griñán declarar ante un juez?


Casualidad. Son casualidades, cosas que pasan. Canal Sur da una noticia sobre una empresa de energías renovables y, ya ven, aparece el jefe delante de un cartelón donde la Junta se anuncia como patrocinador de esas maravillas. Cualquiera diría que lo habían llevado y puesto ahí, que se había preparado ese plano, que habían pensado la noticia sólo para enseñar el cartel, que era otro servicio más a la propaganda de sus dueños políticos. Pero no, sólo las mentes enfermizas pueden otorgarle a esta inocente casualidad intención aviesa. Como si no conociéramos a los grandes profesionales de Canal Sur.

Hoy viernes: El largo viaje (15/06/2012)



A Alfonso Guerra le gustaba hacer gracias sobre el largo viaje del PP hacia el centro: “de dónde vendrán éstos que aún no han llegado”. La verdad es que la corta historia democrática de España aún tiene muchos viajes sin acabar. Aquí había una derecha tradicionalista, cuartelera, infantilona, meapilas, que el franquismo amazacotó, más alguna peculiar excrecencia anecdótica como el carlismo, esa ridiculez un poco carolingia. No había derecha moderna, liberal o demócrata-cristiana, que se tuvo que ir haciendo en un proceso de iconoclasia, reeducación y purga. El centro de la UCD creo que fue más símbolo que otra cosa. Algo como la intención de ofrecer al ciudadano, atrapado entre las dos Españas machadianas, un punto de referencia intermedio, un lugar de equilibrio a partir del cual construir la idea (pedagógica idea) de que las ideologías no significan antiguos bandos ni sistemas totalizadores en pugna, sino posiciones dentro del marco democrático, ya irrenunciable, de un Estado de Derecho. Sí, aquella derecha antigua tuvo que migrar hacia una derecha moderna, eso es innegable. Pero falta la otra parte: el viaje de la izquierda, de la socialdemocracia o del poscomunismo, que les lleve a aceptar la legitimidad democrática de la derecha. Estos dos viajes configuran la Transición, que yo aún no veo terminada. Sobre todo aquí.

Javier Arenas se va y deja al PP como la primera fuerza política de Andalucía. Esto lo consiguió no por quitarse él la corbata, sino por quitarle tics y telarañas al partido. Aún se le escapaban cosas como hablar de “las personas normales”, pero el discurso y las propuestas eran ya las del centro-derecha europeo. Habían llegado casi al final del viaje, aun conservando en el electorado un ala dura más estética que otra cosa, pero que Arenas se ocupó de marginar o amputar dentro del partido. Arenas, al que una vez le vi los zapatos muy gastados, supo que para transformar el PP tenía que conocer Andalucía y a la vez hacer que Andalucía conociera a ese PP que ya no podía ser nunca más una caricatura de señoritos y pijos con banderita. Pero el viaje debe continuar. Y debe continuar pasando el relevo a otra generación. Zoido es un hombre de partido, con experiencia y bagaje, aunque quizá demasiado folclórico y castizorro, pero creo que se debería bajar de ese tren de carbonilla igual que Arenas, reconociendo que su parte del viaje terminó y que no pueden seguir los mismos maquinistas ya tan tiznados. Lo malo de que se vaya Arenas es que el partido era él, sin corrientes, sin familias, sin delfines. Zoido puede servir para llevar el partido a las cocheras, pero el PP andaluz debe buscar su cara nueva, su época nueva, para la última etapa del largo viaje en Andalucía. La etapa que dé por finalizada la Transición, para ellos y para la izquierda: cuando nadie entienda que se pueda querer echar al otro de la Democracia.

Somos Zapping: Rescate divino (11/06/2012)



Los papeles del camión. Todo el mundo le ha dicho a la Guardia Civil alguna vez lo mismo que Chaves, que en el alcoholímetro o en sus apreciaciones sobre su forma de conducir “hay un error grave”. Eso le vimos afirmar en las noticias de Canal Sur, con cara apretada y mala calidad en la imagen, como si el nerviosismo de Chaves provocara interferencias en la cámara. Me extrañó que a eso de que su Gobierno “nunca, nunca, conoció ninguna irregularidad ni ninguna ilegalidad” no añadiera algo como “si hubiera cometido una ilegalidad, no me habrían votado los andaluces”, que sonaría tan suyo. A Chaves y a Griñán ya le están mirando los papeles del camión y, de momento, la estrategia del PSOE está siendo recurrir a la excusa del civilón malage que les tiene ganas. También la jueza Alaya tiene un poco cara de civil y con eso se explica todo. Lo siguiente ya sabemos que es contar que vienen de una boda y sólo han tomado un par de EREs. O que la culpa es de su cuñado.


La carriola. Fátima Báñez ya es la nueva Celia Villalobos. Su plegaria para que la Virgen del Rocío nos saque de la crisis casi supera lo de aquel hueso del puchero. Debe de haber una maldición para los ministros andaluces, algo que les empuja hacia un momento de tontería grandiosa que les dejará una caricatura para toda la vida. Yo creí que habían hecho ministra a Toñi Moreno. Vaya cachondeo que se ha montado en prensa, televisión e Internet a costa de esa teoría del rocierismo económico y del rescate divino. El Gobierno español en una carriola, con estampitas y medallas como paelleras, cantando la Salve como último recurso, ha tenido que dar tanta pena o vergüenza que nos van a prestar 100.000 millones. En Europa habrán pensado que cualquier cosa era mejor que llegar a ver la horrorosa estampa de un Gobierno haciendo la lechuga.


Solidaridad barata. Me carga esa solidaridad afectada, cosmética, teatral, que no exige donar ni salvar ni contribuir a nada, sólo figurar en cualquier sarao que les dé por llamar solidario. Algo como ponerse el sombrerito de la solidaridad y ya fardar con eso, como hacen los famosetes. Justo lo que hicieron en Canal Sur atendiendo a la iniciativa Somos de las ONG, que invitaba a ponerse un día una prenda al revés como símbolo de la voluntad de cambiar las cosas. Pero el símbolo a veces se queda en pantomima o en ironía. Con el espíritu solidario quemándoles, en Canal Sur los presentadores se pusieron chaquetas al revés (Álvaro Moreno de la Santa parecía que lo que se había puesto al revés era el traje de Spiderman) y hasta le dieron la vuelta a las cámaras. Tiene guasa: Canal Sur, tan conservador, estático, complaciente, acrítico, recalcitrante y resignado, tan sumiso con el poder, poniéndose de paladín de los que quieren cambiar el mundo. A veces la solidaridad sólo es una fantochada. Y barata.

Himno friki. Nuestro frikismo local, que nunca descansa, ha creado un himno para la selección española en esta Eurocopa. Un tal Alfonso Mondaca, señor con pinta de quiosquero, ha regurgitado con la ayuda de Manolo el del bombo una rumba con música vulgar o copiada (suena como el No nos moverán) y cuya letra merece haberse escrito en una servilleta pringosa de tortilla de camarones. Queda como si Las Seventies y su abuelo defendieran el barco de Chanquete con palabras futboleras de Leonardo Dantés.

Relevancia. Aluciné el otro día cuando Canal Sur dio como noticia un comentario sobre Rajoy que había escrito Mario Jiménez en su blog. Ellos, siempre tan atentos a la actualidad significativa y a las fuentes relevantes y solventes.


Paraíso. Sánchez Gordillo ha estado en Venezuela y, además de glorificadores comentarios en Twitter, ha dejado para la posteridad una incalificable entrevista en la televisión de allí que fue como la de un niño en Disneylandia (búsquenla en Youtube, no tiene desperdicio). Le brillaban los ojos y la barba se le había convertido en algodón de azúcar al conocer el Paraíso: “casi mejor que en mi casa”, decía que estaba. Pese a elementos como éste, de momento IU no consigue su pequeña Venezuela en Andalucía. No sé si agradecerle al PSOE su labor de domesticación.

Hoy viernes: Jubileo de Báñez (8/06/2012)


La Reina de Inglaterra ha paseado su gloria como si la sacaran en cama con dosel por la calle. La monarquía es un poco eso, imaginar que alguien se viste de Pantocrátor igual para ir a Westminster que para dormir. Ese desfile con carrozas, lanceros y hasta carillones nos demuestra que las monarquías, de la tierra o del Cielo, sólo existen si se las pasea con ruedas de oro y pagodas en la cabeza. Aquí lo hacemos con esas Vírgenes que reinan en el plateresco, los almanaques, los costureros o las marismas. La Reina Isabel ha tenido su jubileo rodeada de un Imperio de casitas de muñecas y cajas de música de la majestad, aunque esta vez no estaba Purcell para escribir odas, sólo McCartney y otros lores guitarristas. Hasta la eternidad debe cumplir años, celebrar su cansancio, encargarse tartas como palacios. Si no, la gente se olvida de que existe lo eterno. Por eso también la Virgen del Rocío va a tener su año jubilar, se va a poner anillos de novia y va a hacer crecer tenderetes para el mercadeo de estampitas, milagros y sevillanas. Un gran espectáculo y un gran negocio para la economía basada en las almas y también para la basada en el dinero, tan caedizo, y que quizá son la misma. Si aquí recurrimos a los santos con palma y a las Vírgenes con muceta para que llueva o gane un equipo de fútbol, por qué no vamos a hacerlo cuando nos asfixian la crisis y los mercados vikingos. Bien lo ha visto la ministra Fátima Báñez.

Báñez ha agotado muy pronto esa primera etapa racional que existe en toda desesperación y ya se ha encomendado a la Virgen del Rocío para que nos saque de la crisis. Lo próximo será hacerle vudú a Merkel. Gran tranquilidad y confianza ha debido de generar eso en Europa, saber que los ministros españoles ya se están persignando y que en los consejos de los viernes la cosa va de oraciones y novenas, sin descartar el flagelo y el cilicio para Rajoy. Pronto veremos a todo el Gobierno bautizándose con manzanilla en el Quema, ante la sagrada y caliente respiración de los bueyes. Báñez, como una pastorcilla portuguesa, se ha arrodillado y ha agradecido este jubileo rociero, según ella “el regalo que ha hecho la Virgen del Rocío, aliada privilegiada y embajadora universal de Huelva, en el camino hacia la salida de la crisis”. Deberíamos montar un jubileo para cada Virgen y cada sagrario, verían qué pronto se acababa este tormento. Menos mal que el Cielo nos protege y que a nuestro Gobierno, tan pío, se le ha aparecido la solución como a Constantino: In hoc signo vinces. “Viva la Virgen del Rocío”, gritó la ministra en Huelva. Pero las Vírgenes son madera como las reinas son señoras sin dedo dorado. “Exsultate, jubilate”, aunque no hay eternidades ni milagros y las monarquías de salón o de las nubes lo único que hacen es exhibir sus bomboneras ante el hambre. De los gobiernos, se espera otra cosa.

Somos Zapping: Échale guindas al pavo (4/06/2012)



Morena clara. Fue pensar en la Guardia Civil y en Griñán y no poder evitar imaginarme al Presidente cantando eso de “échale guindas al pavo”. La verdad es que lo de la Junta con el 'fondo de reptiles' es como lo de los jamones de Morena clara. Su increíble versión de los hechos la podría haber defendido Lola Flores frente al fiscal panocho que hacía Fernando Fernán Gómez casi con el mismo desparpajo que Susana Díaz o Mario Jiménez. En fin, “entró un civil con bigote / ozú, qué miedo, chavó”, preguntando dónde estaban ese pavo y esa pava, y el PSOE le cantó la bulería del disimulo con todo el arte del que es capaz. Nada menos que de “abrir una causa general contra Griñán” acusa la ínclita Susana Díaz a la Guardia Civil. Los implicados en la aviesa conspiración van aumentando: primero la “derecha mediática”, luego la jueza Alaya, castigadora al servicio del PP; y ahora, la Benemérita. Les persigue todo el Imperio Galáctico y la Justicia es Darth Vader. La verdad es que hubo que esperar bastante en las noticias de Canal Sur para oír a los socialistas hablar del asunto: primero, el día castrense del Rey con muletas de banderas, y luego noticias sobre líneas de autobuses en el Cabo de Gata, protestas de ciclistas por los parques sevillanos y hasta un taller de estampación al aire libre. Pero por fin habló Susana Díaz, con bastante mala cara: “Me sorprende enormemente que la Guardia Civil haga ese tipo de valoraciones, basadas exclusivamente en indicios, sospechas y suposiciones”. Ella es que no ha visto nunca Colombo, ni Ley y orden. Indicios y sospechas, vaya manera de investigar. ¿Cómo van a llegar así a las pruebas? Sin duda, en el PSOE son conscientes de la gravedad del asunto, pero no les queda otra que escenificar estos agravios infantiles. “Parece que se intenta imputar a Griñán a cualquier precio”, decía el locutor de las noticias citando a Mario Jiménez. Más bien parece que la Guardia Civil hace su trabajo y que el rastro grasiento de los jamones, birlados con guasa y descaro, lleva a todo el equipo de gobierno de la Junta. No se puede entender que tantos millones del presupuesto eludan su pertinente fiscalización si eso no ha sido planeado y consentido desde arriba. Parece más lógico que conspiranoico, pero ya se sabe que la Guardia Civil primero te para y luego te encuentra algo. Nada, a disimular. “La fetén”, decía Fernando Fernán Gomez disfrazado de gitanillo del Sacromonte, haciendo el paripé. Que vayan preparando una buena historia para el afane de sus jamones porque creo que librarse enamorando a un fiscal con cantecitos y ojazos va a ser complicado.

Circo. Siempre hay un momento en todas las comisiones de investigación en que alguien saca lo del “circo”: cuando no interesa que comparezca alguien gordo. En este caso, a Mario Jiménez le parece que llamar a Griñán sería como llamar a un tragafuegos. “No vamos a convertir la comisión de investigación en un circo”, decía en las noticias. Pero el circo sería preguntar a los tramoyistas y no a los jefes del asunto. Sin embargo, es lo que tienen planeado. Ya verán ustedes la pantomima de esta comisión a la que le tenía tantas ganas IU. De momento, Valderas ha declarado que “lo que ha trascendido no afecta al actual Gobierno”. Vaya, ¿no afecta que el presidente de la Junta tenga detrás todo el negro charol de la Guardia Civil? Claro que desde que a Valderas lo ponen a inaugurar, su opinión de lo que es circo ha cambiado mucho.


Milagros del camino. Las cosas de esta Andalucía de izquierdas: Misas de romeros en Canal Sur con obispazos como directores de orquesta de las almas, reportajes de Toñi Moreno vestida de jaramago buscando “verdaderas historias de fe” en el Rocío, y la televisión pública rendida a esos largos amaneceres con empalizadas para el vuelo de diosas madres neolíticas. Creo que en realidad no somos ni tan progres ni tan piadosos, sólo rigurosamente atávicos, atavismo que puede combinar la estética de la izquierda con el rezo menesteroso, consecuencias de ser pobrecitos históricos. Por eso Canal Sur no ve contradicción entre su transversal discurso progre y las ranciedumbres folclóricas y regionalcatólicas que le gusta exaltar. Se trata de comulgar con ese populismo atávico, capaz de aunar izquierdismo sanguíneo y supersticiones del desamparo que llevan a un palomar de dioses. En esta febril confusión, desaparecen las aporías y hasta la crisis: en AD nos enseñaban hermandades llenando carros con jamones o nos contaban lo que se han gastado en bueyes sagrados. Mientras, Cuatro nos mostraba grabaciones realizadas por detectives con beneficiarios de bajas médicas cabalgando por el Rocío tranquilamente. Milagros del camino. Diluyen ideologías, sanan espaldas y atocinan la crisis con vinazo, histeria y jamonería.

Hoy viernes: Primavera (1/06/2012)


Así es esta primavera en la que el dinero viene con su ramo de flores secas, como una novia cadáver, y las nubes parecen pastillas de jabón de los pobres, o escamas de un sol acebollado y a medio guisar. Dura, triste primavera en la que el cielo es papel que se va quemando como una casa japonesa y la tierra ve a los hombres haciendo labor de escarabajos. Cultivábamos dinero que se transformó en hongos, creímos en políticos que amaestraban cuervos, subieron las hormigas a nuestros banquetes y copones, y ahora los perros nos huelen como a la enfermedad. Nos enamorábamos en primavera, de las piernas en bicicleta, de las axilas con margaritas, cuando los ojos de las chicas guardaban por fin el invierno como en tarros de mermelada. Pero hace mucho que el invierno no se va. Deja ahí su estaca en nuestra casa, deja lo húmedo en los huesos, deja cáscaras en los cestos. Ya no hay ni primavera, esa esperanza de que la tierra escondiera sus cementerios, de que nos curaran de todo el sol y una melena con color de violín o vino. Este invierno del dinero y la pena no se acaba. Estamos ateridos de alma, estamos tiesos en la cama y pasamos el frío de los aviadores y los pastores. El dinero era el cristal que se iba agrietando en nuestras ventanas.

La primavera es ahora el hospital sin techo del mundo. Los celadores del dinero y la política traen tarros y venenos en carritos del miedo, punzan nuestras venas y nuestros países. Los asesinos intentan curarnos y nada puede causar más terror. Han echado una sábana de muerto sobre la primavera, acosada por jeringas y palanganas. Queremos otra vez la primavera de verdad, pero ya no es posible. La robaron todos esos políticos que nos arruinaron y que ahora sólo hacen de espantapájaros. Nosotros os dimos primaveras de 20 años, parecen decirnos. Sí, recordemos cuando no había inviernos para la cosecha del dinero. El tiempo de los manantiales y las cornucopias, cuando el dinero era tan sencillo como falso. Dinero como cereal que se fue pudriendo, que ellos fueron pudriendo. Los partidos con sus cajas, sus negocios y sus jardines colgantes; los banqueros con su ambición y su ceguera. Ya no puede haber primavera cuando se repartieron el sol y helaron la tierra. El castigo por dejarnos sin primavera implica venganzas de los dioses. Ahora, la primavera sólo puede estar en otro mundo. Hay que recolocar las esferas que atan los planetas. Hay que reinventar la democracia, hay que purificar la política, hay que escarmentar a los codiciosos. Esta primavera entre plásticos, esta primavera intubada, que te asfixia con sus tallos. La luz enferma, la tierra como una alfombra de pájaros muertos. Antes nos enamorábamos en primavera, antes corríamos detrás de la bicicleta del sol. Pero así es esta primavera, claustro de otro invierno, el cielo raptado por bandidos como una princesa.

Somos Zapping: Teletienda ideológica (28/05/2012)



La verdad conveniente. Cuando la economía es un milenarismo de sectas, profetas y locos, cada cual con su receta y su salvación, el problema de hacer un programa sobre la crisis se resume en una decisión: o se presentan más o menos decentemente los hechos y las diferentes visiones y opiniones sobre el problema, o se parte de una posición ideológica y se monta el publirreportaje de teletienda. En Canal Sur, lo que se espera es lo segundo. Y eso hicieron en Es posible: una teletienda que intentaba vendernos, sin pudor, la máquina de abdominales ideológica que ya se pueden imaginar. Las imágenes siniestras de Rajoy y sus ministros, la enumeración de recortes, las referencias al “estrangulamiento del estado del bienestar”, eran la parte macabra, arriñonada y en blanco y negro de esa teletienda. Las manifestaciones, las protestas y las declaraciones de “expertos” contra la política del Gobierno y la Unión Europea, eran la parte colorista y esperanzada que te presentaba el producto a vender, eso de que “otra política es posible” que tanto nos suena. De nuevo vimos a Juan Torres, ese raro catedrático de economía que habla como Sánchez Gordillo y que ya dijo una vez que “las grandes empresas farmacéuticas crean enfermedades falsas”. Y volvió a lucirse. Para él, no pasa nada por tener déficit. Es más, “el déficit cero es una barbaridad, no tiene fundamento, es sólo una manera de disciplinar a los pueblos para que se sometan al dictado neoliberal”. Pero no fue una opinión más de un economista, entre otras. Fue la única. E insistía: “Que digan que los recortes hay que hacerlos porque hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, porque no hay dinero, porque hemos gastado demasiado, es sencilla y llanamente una mentira de los gobernantes. Tenemos esos recortes porque queremos darle dinero a la banca privada, y ésa es la verdad de la crisis”. El evidente sesgo ideológico de esta muy discutible “verdad” no importa. Es la que conviene. Y con este espíritu siguieron con los recortes en educación y sanidad, y hasta con el sufrimiento de los inmigrantes, aliviado, eso sí, por acuerdos de una ONG con la Consejería de Salud de la Junta para hacerles descuentos en las recetas. Qué oportuna mención, vaya. Y por si faltaba algo, la siempre consonante opinión de Javier Pérez Royo. El programa, entre perrofláutico y rubalcabesco, fue un auténtico vídeo de campaña. Ideología metida por los ojos. Canal Sur en su apoteosis.


Los niños y el ogro. La propaganda entra mejor con niños. Economistas oscuros e imágenes de la bolsa despeñándose resultan demasiado fríos. Es mejor poner a niños en su escuela jardín para hacernos ver lo que se va a cargar la derechona con sus recortes educativos. Niños tocando el tambor, pintando con los dedos, oyendo a alguien hacer música con tubos y chanclas... Así de finamente se educa en Andalucía a los más pequeños para que salgan artistas y genios, según nos mostraba el programa Los reporteros. Pero todo eso se va acabar porque ha llegado Rajoy, el ogro que se come a los payasos. Yo me pregunto en qué momento se fastidia esa maravillosa educación pública andaluza para que al final salgan nuestros fracasados escolares, nuestros andilucas, nuestros chavales analfabetos funcionales y nuestro 50% de paro juvenil. O para que terminen en niños de Juan y Medio. Todo eso ya estaba ahí antes de Rajoy, desde luego, pero a quién le importa. Esta derecha que roba la plastilina, que va a convertir a los prometedores escolares andaluces en niños de inclusa, eso es lo que hay que contar. Y qué bien lo hace Canal Sur.


Innovaciones a salvo. Menos mal que aún nos queda Tecnópolis. Ver presentar las innovaciones andaluzas con un campanario anidado por cigüeñas detrás ya es motivo para el optimismo. Nada puede ir mal si las modernidades que nos esperan son del calibre del hilo de coser, las vacas y cerdos de la Sierra Norte de Sevilla o una receta árabe para un licor que necesita de un hombre metiendo troncos en una caldera como el abuelo de Heidi. O bañeras con burbujas para hacer despedidas de soltera en hoteles de la Costa del Sol. No son hipérboles mías, sino estampas reales de este programa. Me dan esperanza porque seguro que ni Rajoy sería capaz de recortarnos en botijos, chamizos y tumbonas. Nuestras innovaciones están a salvo.

Alma máter. Avance para la semana que viene del programa Tesis, que se supone que va sobre la Universidad y la investigación: “El yeso, un mineral polifacético”. Alma máter.

Hoy viernes: La oportunidad (25/05/2012)

Eran como sacristanes de la Escuela, más viejos que la cantina, y bebían y reían y ligaban más que nadie. Tunos o tunantes, gran fama tenían los alegres sinvergüenzas de la Escuela de Peritos de Cádiz, a los que sólo podían medirse los de Medicina. Adorables golfos, no tenían por qué ser malos estudiantes, sólo medían su juventud y sus fuerzas cuando les tocaba en la vida. Siempre tenían alguna asignatura con las convocatorias a punto de agotarse, pero nos daban consejos y nos enseñaban los motes y los trucos de los profesores. Esos estudiantes padracos, largos sufridores de la carrera, no los tenía yo por vagos, sino por viejos soldados. Los recuerdo en aquel bar, el Aula Magna, que no sé si aún estará, entre apuntes y bandurrias, olorosos de cerveza y camaradería. Qué demonios, aquello era nuestra juventud, aquello era la Universidad, aquello era la Escuela de Peritos, donde ser empollón no servía. Allí, lo más fácil no era aprobar, sino rendirse. Pero ellos resistían, dándole un tiempo a la biblioteca y otro al bar, porque si no, eso no lo aguantaba nadie. Si aquello sólo estuviera allí para los cuatro coquitos que van a curso por año, las aulas terminarían siendo confesionarios. Ellos resistían y tardaban, pero creo que se merecían la oportunidad. Muchos lo dejaban, pero otros lo conseguían y hoy son buenos profesionales. No todos eran vagos. Y no todas las carreras están hechas para sacarlas del tirón. Vayan ustedes a la Escuela de Ingenieros de Sevilla, por ejemplo, a que les cuenten historias.

Que se pongan de acuerdo. No puede ser que la izquierda se haya cargado la enseñanza media, infantilizándola y bajando su nivel hasta hacer de la Universidad un escalón para gigantes, y ahora la derecha encima suba las tasas universitarias y castigue el bolsillo no de los estudiantes inútiles, sino de los estudiantes normales, los que no son genios, los que suspenden asignaturas y agotan convocatorias como casi todos. Esta huelga tiene mucho de política pero también bastante de razonable. No me gusta que las asambleas crean que pueden votar la supresión de derechos de otros, no me gusta que organicen esta protesta sólo como otro paso para una vaga revolución. Pero esta puñalada al corazón del futuro del país es una canallada. Para estudiar, a los ricos sólo se les exigirá dinero. A los pobres, poco menos que ser superdotados. Y esto mientras fluyen los millones para cajas saqueadas y arruinadas por la partitocracia. Se puede reorganizar una Universidad sobredimensionada y endogámica, pero dejen que tengan su oportunidad esos estudiantes con hatillo, emigrantes de sus pueblos, esperanza de sus familias, con sus fiambreras congeladas de la madre, su piso lleno de pelusas y su asignatura maldita, ésa última que queda cuando uno ya parece el que cierra por la noche la facultad.