Apostolado
de Susana. Se veía venir: el debate con colores
de ruleta de Telecinco, con el público allí mismo palomitero o salpicado, con
los temas del taxista, con la falsa participación que es sólo repescar en
Internet y grabar a la señora en la plaza… Pónganle todas las arrobas que
quieran, pero @debate ya está más
visto que Javier Aroca, que, cómo no, también estaba, con su cabeza y su pelo de
profeta ante su viento imaginario y eterno. Si al formato completamente vulgar
le unimos la visible intencionalidad de Canal Sur, la cosa tenía que terminar
en esperpento. No se merece otra palabra la avilantez de presentar el tema de
la “regeneración política” con las imágenes y las palabras sacrificiales de
Griñán y, luego, de Susana Díaz en su discurso de investidura (justo lo de “me
avergüenza la corrupción y me propongo combatirla con todas mis fuerzas”, con
convenientes zooms subrayando su determinación). Pero continuaba la voz en off:
“Y para combatirla, lo primero que ha hecho ha sido mover ficha renovando a su
equipo de Gobierno”. Tremendo porrazo a la corrupción ése, sí. Y enfrente, a
contrapié, y con sus siglas sobre fondo negro, “el PP sigue sin decidir quién
será el sucesor de Arenas, salpicado por el caso Bárcenas”. “Andalucía sólo
supone un eslabón en la cadena [de esa regeneración]”, seguían, para terminar
colando el eslogan mismo de Susana Díaz en un gran rótulo sobre el hemiciclo
del Congreso: “¿Nuevos tiempos para la política?”. Sí, Susana Díaz ha
despertado a toda la política, por lo visto. Una revolucionaria. Cuando uno de
los invitados se limitaba a hablar de la “crisis de los dos grandes partidos” en
general, el presentador, Rafael Fernández, reconducía la cosa: “En el caso del
Partido Socialista en Andalucía, ¿no lo podemos calificar de renovación?”. Hombre,
y aún más: inspiración, apostolado… El susanismo debería crear pronto un logo
para que Canal Sur lo adoptara como suyo. Ese sol perplejo o copyright navideño
que identificaba hasta ahora a La Nuestra se ha quedado viejo en el Nuevo
Tiempo.
El
mal picador. Antonio Lozano, ex Director General
de Presupuestos, es imputado por prevaricación y malversación; admite que las
transferencias de financiación no se pueden usar para ayudas, y además la jueza
nos descubre que la Junta engordaba los gastos del IFA/Idea para tapar el fondo
de reptiles. Un bombazo que destroza las tesis de Aguayo, Magdalena Álvarez,
Chaves y Griñán. Pero en Canal Sur, las noticias sobre Alaya parecen taurinas,
así que lo que venían a decir era que había castigado demasiado al imputado,
como un mal picador. “Lozano, tras contestar a cinco preguntas, ha pedido que
se suspenda su declaración por considerar que se no se están respetando sus
garantías”, abría Juan Carlos Roldán. “Ha sido un interrogatorio tenso, con
algunos rifirrafes”, comenzaba su crónica la inevitable Bárbara Ruíz. Pasando
rápidamente por los graves cargos, sin mencionar los gastos engordados ni lo
que suponen, los micrófonos recogían luego las quejas o las simples tácticas de
defensa del abogado. No es que eso no sea digno de mención. Pero el titular no
puede ser algo así como “pobre toro” cuando ha corneando a toda la cuadrilla.
1 comentario:
Esta es la televisión pública y de calidad que ahora, con el cierre de canal 9, estan sacralizando como un derecho ESENCIAL.
Y si solo fuese la manipuación... pero es que nos cuesta mucho dinero, pues mucho de él viene de procedimientos "dudosos" de asignación, aparte de inmorales.
En definitiva, NO QUIERO esta tele pública, no con mi dinero. Ya está bien de mamandurrias!!!
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